Sin poder superar su muerte
como tampoco sin poder superar su vida. Más bien
dicho, nunca he llegada a superar nada relativo a ello, ni su propia
existencia. Realmente un ente abstracto, virtual. Ahora, la pregunta que nunca
he podido responderme, ¿existe? ¿Imaginación? ¿alucinaciones de mi cerebro?
¿delirios? Tal vez, solo sea yo mismo, y por ello, ni existo, ni vivo, ni
muero, simplemente, soy pensamiento puro.
Relat enviat al Concurso Relatos en cadena, en que cada nou relat ha de començar amb la darrera frase del relat guanyador de la setmana anterior. Relats de 100 paraules